17 de octubre, 2 años, 1 mes
Desde que ocurrió aquello no escucho música en el coche a no ser que vaya acompañada.
Antes lo hacía a todas horas excepto a primera hora por eso de escuchar las noticias. Después me ha sido imposible porque la música permite a mi mente volar y pensar, así que escucho programas que no sean de música para detenerme a escuchar de lo que se habla y tener la mente ocupada.
Hace unos días volví a escuchar música durante un rato viajando sóla. Iba de Sevilla a Huelva y pusieron una canción de hace más de veinte años y sí, mi mente viajó de nuevo pero a otro lugar y otra época.
De repente nos vi de discoteca bailando y cuando me dí cuenta iba sonriendo recordando y difrutando de aquellos momentos.
Aunque muchas veces lo creo imposible por los numerosos baches y recaídas, parece que poco a poco te voy recolocando junto a mí de una forma que ya no sólo trae dolor.
Un beso y masajitos hermanito.
P.D. Una tarde de verano te dedicaste a hacernos fotos a tu madre y a mí. Aún recuerdo la elección de la ropa, la forma del peinado y las distintas poses que me hiciste hacer en el patio del colegio. A partir de una de aquellos fotos hiciste este cartel que tengo enmarcado en mi casa.
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